Elinstante. ¿Dónde estarán los siglos, dónde el sueño. de espadas que los tártaros soñaron, dónde los fuertes muros que allanaron, dónde el Árbol de Adán y el otro Leño? El presente está solo. La memoria.JotgeLuis Borges es, sin duda alguna, el escritor argentino más destacado del siglo XX. Fue un poeta excep cional, con lenguaje marcadamente propio. No fue novelista; que se sepa, jamás pensó ni intentó escribir una novela. Su obra en prosa está consti tuida por cuentos y ensayos breves, pero alcanzó un nivel fuera de lo co
Yono sé si fue un Ángel o un ocaso la claridad que ardió en la hondura. Insistente, como una pesadilla, carga sobre mí la distancia. Al horizonte un alambrado le duele. El mundo está como inservible y tirado. En el cielo es de día, pero la noche es traicionera en las zanjas. Toda la luz está en las tapias azules y en ese alboroto de chicas.
Asíson los amaneceres de Jorge Luis Borges. Violentos, despóticos. La luz ofende la ternura de la penumbra, torna real – ergo tedioso – todo cuanto toca. Y, para Borges, la realidad no es más que un laberinto de espejos. De modo que lo verdaderamente real está en el sueño, en la noche. En la oscuridad tibia e inexorable del ocaso. JorgeLuis Borges. (1899–1986) El hacedor (1960) A LEOPOLDO LUGONES. Los rumores de la plaza quedan atrás y entro en la Biblioteca. De una manera casi física siento la gravitación de los libros, el ámbito sereno de un orden, el tiempo disecado y conservado má- gicamente. A izquierda y a la derecha, absortos en su lúcido sueño, se